Girando en el cielo una pluma danzante
Viaja escribiendo un concierto de aves
Que saben volar y dejan alejarse
Los miedos y restos de dificultades
Pequeña fracción de una estrella gigante
La envidia del sol es su cuerpo brillante
La luna sin ella es insignificante
Por eso no duerme intentando cantarle
Su cable a tierra donde nadie se espera
Quieren bajarla de donde ella se queda
Aprendió a brillar y en la escena despega
Se eleva abrazada a sus lianas de tela
Enredada en las nubes ya sabe escapar
En un lago de cisnes con agua de mar
No es una paloma, es un ave rapaz
El suelo no sabe de lo que es capaz
Suave y majestuosa, dulce bailarina
Valiente resiste golpes y caídas
Si baja los brazos, sus piernas estira
Si está caminando, el aire la imagina