He dejado huellas a lo largo del destino,
que acaso un inesperado crítico literario
descubrirá sorprendido.
He dejado pistas que siguen mis pasos,
que muestran mi camino;
los libros que he leído,
la poesía que he dejado,
los días y las noches que no he dormido,
porque dormir es la necesidad de no hacer nada,
y acaso escribir en sueños
poemas que nunca serán escritos.
Y atando cabos ese crítico sorprendido,
tendrá en sus manos el mapa de lo que he sido:
No el mapa del tesoro que no tengo;
ni el mapa que muestra el camino donde escondo,
en caja de plomo,
y en un lugar del planeta,
una obra inédita, que lo será por siglos.
Solo encontrará el camino de aprendizaje
que ha seguido el poeta,
que siempre fue poeta sin haberlo sido.
Y entonces quizás tendré la suerte
de ser conocido,
por un lejano descendiente de este bardo,
que sentirá orgullo de ser semilla genealógica,
de un poeta hasta entonces desconocido.
Frank Calle (20/ nov/ 2019)