Por las noches, mis luceros abrigan tu morada
Escucho tu voz florecer como tonada
En mi dogma, los sueños de mi sombra
Viven en el pétalo de una flor marchita
Entre tantas ansias del aviso moral
Que nos separa, entre tu alma y la mía
Tan lejos del sol como nostalgia del amor
Y poder salvar las distancias, y volar en el viento
Para encontrarte, en el rumbo perpetuo de ese mundo
Yo quiero abrazarte y besarte como en un cuento
Del mágico encuentro entre voz y yo...