Ben-.

Sobre mis narices-.

Seré yo tan pijotero,

de negar al prójimo

el talento y, con ello,

el sustento familiar,

y no albergaré jamás,

más que miserias escritas

sobre mis narices y las

de los demás?

No me explico a qué tanto verso

alocado y sin motivo, en fin...

¡para algo se hizo el universo!-.