De nuevo lejos, de nuevo ausente; de nuevo se inunda mi alma con increíbles chubascos fuertes, lloro por dentro porque por fuera, feliz debo reflejarle a mi madre siempre.
Se llegó otro año más en su vida, acumula una raya más para sus caminos verdes y aunque en su carrera nubarrones muy fuertes presencio, sigue allí de pie y al margen de la vida, fuerte.
Cuanta dicha para mi festejar tu cumpleaños y aunque a lo lejos me encuentre, te felicito, te extraño y te amo. Un abrazo quisiera darte, pero tan solo en pantalla he de observarte, el deseo más grande es que mucha vida y salud tengas por delante.
Llegó el día, otro años más, otro momento madre hermosa donde las velas debes apagar, en donde mi pedazo del pastel lo compartiré con la mujer que me dio la oportunidad de respirar.
Henry Ruiz
5 de Diciembre 2019