el estómago encogido
Se cura susurrando al oído
El alma congelada se despierta
con fuego bajo las sábanas
Las migrañas leyendo historias
de fantasmas.
El amor dolido escribiendo
versos de vida y tinto.
El dolor de garganta
de gritar en versos lo que te quiero
se alivia con tu lengua de besos empapada
También puedo amarte con silencios
callado y quedo
con escuetas palabras
solo hechos.
Has probado mis alas
solo las bato cuando me amas
Inunda mi corazón con tus lágrimas
En busca de la esperanza
fui agotando los besos
apurando los momentos
Ahora el dolor es menos
los recuerdos y yo
ya nos conocemos.
Buscando la ilusión
me encontré con las ganas
de abrazarte fuerte
de llorar al quererte.
Me quedé sin labios de lanzarte besos
para huir del infierno
Pero ahora te tengo
no cierres los ojos
sin decirme te quiero.
Buenas noches lucero.