Hoy caminé sobre un jardín sombrío e inerte , en cada paso, tropezaba con algunas letras esparcidas por doquier , que sollozaban de tristeza por la partida del poeta .
No se si lo soñé , o era una triste realidad , el poeta se había marchado en sus sueños, donde las olas del mar lo envolvían en su viaje a la eternidad
Lentamente me acerqué a sus letras que parecían estar olvidadas y una por una las fui acomodado en mis pensamientos querían despedir a su poeta
Siempre es triste despedir un amigo, no dejaremos que su viaje termine con sus recuerdos , que ahí están y ahí quedarán por siempre en nosotros , lo sentimos muy cerca , porque somos parte de la misma esencia y así sus letras lo seguirán por el camino al infinito y caminaremos por su jardín disfrutando cada uno de sus escritos .