Ingenuo el deseo, genuino el quererlo
Asombrado de vivo tormento
de un vivir, sabiéndote adentro
queriendo ser tú
y no poder serlo
Ingenuo el deseo, genuino el quererlo
Ser un depósito de tu aliento
cubo quebrado, trozo de un tiesto
dormidera
encogida
a tu tacto
Ingenuo el deseo, genuino el quererlo
Imaginarme de ti colmado
es de un vivir que vive embriagado
sellar tu sustancia
sellar tu fuego
Ingenuo el deseo, genuino el quererlo
Todo momento tiene su templo
¡Compasión!
Fuente de sabiduría
Tu voz ausente
Crujir de alegría
Lo canta, lo susurra, lo grita;
La insistencia del recuerdo, es la vía.
Servidumbre dorada
¡Préndeme!
Mi loto es tan verde
a esa flor todavía
Ingenuo el deseo, genuino el quererlo