Sabía que era un sueño,
lo fue,
siempre lo supe,
y nos desvanecimos junto a la ilusión,
era cuestión de tiempo,
o de eternidades...
acaso no es eso el amor,
Un instante eterno,
que envuelve los cuerpos,
un espejismo que nos Hace atravesarnos en diferentes maneras y nos deja grietas longitudinales.
Es momento de despertar.