Cuando el sol calienta la ciudad entera,
se vuelcan a la playa en busca de alegría,
el día es más largo, la noche y la quimera,
la fe llena el encanto de amor y melodía.
La arena ha calentado, el mar llama a la gente,
la brisa se extiende cubriendo tu figura,
oh, niña de mis sueños, amor de adolescente,
quisiera encontrarte mostrando tu hermosura.
Una tarde de verano fue cuando nos conocimos,
la arena, el sol, las olas llenó de encanto ese día,
mas tú al contemplarme tus ojos fueron míos,
y amarnos como nunca prometimos con alegría.
Que tarde tan florida, que bello sol ardiente,
cuando tus manos juntas rogad a Dios quisiste,
dejad que mis besos apaguen tu cuerpo tan caliente,
y olvidarme para siempre la tarde que te fuiste.
Que tarde de verano que habita en mi memoria,
de besos y promesas de amor y de encanto,
de playas que anduvimos haciendo una historia,
hoy solo al recordarlo mi ser se pone en llanto.
Fue tarde de un verano que quedó en nuestra mente,
de sueños y esperanzas de volvernos a encontrar,
hoy camino por la playa y te busco como un demente,
y al no poder hallarte, me pongo muy triste a recordar.
Que tarde de verano, que pasión que viví contigo,
la noche fue testigo de toda nuestra emoción,
te fuiste tú muy lejos y me quedé siendo tu amigo,
pero esta tarde de verano, se quedó en mi corazón.