¡Hermosa Nicaragua! Do he nacido
entre lagos, montañas y volcanes;
donde vibra el valor de los titanes
que con gloria nos han antecedido.
De tu entraña se escucha el gran latido
que maldice codicia de rufianes;
ordenando destruir a los patanes
que siniestros destruyen nuestro nido.
Cada cuarta de tierra que pisamos,
tu nos pides que sea venerada,
que la savia de antaño que llevamos
debe ser cual tormenta desbocada;
cuya esencia de honor todos bebamos
¡para ver tu bandera liberada!
Autor: Aníbal Rodríguez.