No le temo a la franqueza,
No me importa el qué dirán,
Digo las cosas tal cual
Con ligera sutileza;
Y aunque a veces mucho pesa,
Conmigo no leerás,
Esa mentira que va
Como valiosa moneda;
Yo prefiero el juicio sano,
Esa reflexión serena,
El recuerdo que han dejado
Los que a veces nos dejan;
El llorar de enamorado
Que por amor se lamenta…