Ramona A.

Amor ciego

Dicen por ahí

que el amor verdadero no existe.

Que los hilos rojos

son los que más fácil se rompen

y que he tenido que ser muy ciega

para no ver venir la tormenta

que provocaste en mi vida.

Pero yo creía en el amor

y ate ese hilo tan fuerte

qué ningún huracán había podido con el,

hasta que tú... decidiste desatarlo

y agarrarte a otro meñique.