Soy brisa y sol tibio
caramelo, pan y vino
mi piel negra por el calor acentuada
tiene aroma de piña madurada.
Soy el ocaso tibio de mar
de la noche, la luna y su cantar
soy el fuego eterno que el amor da
soy azúcar aun en la humedad.
Soy la palabra por los cielos marcada
esa ola grande de marejada
también un murmullo quedo
donde el amor hospedo.
Soy la fuente del amor sin miedos
brasa que arde volviéndose llama
copiosa lluvia que refresca el alma
porque el amor puro llevo en mi seno.
Soy ese aire que lleva truenos
amplificando esos amores que captan
los besos tibios y plenos
esos que a tus labios amañan.
Siembro con copos de colores la vida
con la semilla que de mi alma emana
donde el amor se desborda en ternura
cuando en mi mar florecen tus aguas.
Soy tu sueño bienaventurado
esa flor grande, suave y tibia
que ha permanecido a tu lado
en el baile de tus brisas.
Soy tu amor esperado, tu barca
que con tu amor sus velas izas.
Yamila.