negrolindo

El Ábaco

Eres un ábaco que me sumas y restas,

tánto así como mi jardín en otoño

y la primavera cuando asoma,

tantas rosas y sumas mi apreciable musa.

Sueño con tu inquietud y sed de amar,

me acaricias el alma con tus versos

y tu piel......

Imagino tanta algarabía en mis pasiones

y un sin fin de besos

que ya no puedo soñarte

reclamaré todo tu ser.

Un frío panel de letras nos separa,

una musa que embarga mi corazón

aprendo en mis soledades

a que cada fin de ellas

eres mi luz en tus poemas,

eres mis versos en los míos.