Te escondes hoy a la sombra del recuerdo,
tendida en un rincón de mi melancolía,
cuadros que dibujaron tus manos...
Eres polvo y sín embargo aún sientes.
Se arrastran conmigo envueltos en la niebla,
enormes sombras de soles apagados;
viejas lunas que gimen en mis noches
y se aferran a un presente con débiles raices.
Y yo trato de alejarme apuradamente,
pero por más que corro a esconderme de tus ojos,
siempre mis pasos me regresan a tu lienzo,
y una flor encuentro...siempre nueva.
Queriendo hacer que el sol te abrace,
le busco una vereda a tu memoria...
y te digo entre sollozos...duerme
y renace la espina entre tus flores.
Como una nota fúnebre en letanía,
en concierto de risas y de lágrimas
se regresan los ruegos, los reclamos
y ante tu tumba caigo nuevamente de rodillas.
La música suena lejana..donde fueron tus palabras?
Por que te extraño?..Porque extraño tu mirada?
Tus ojos se apagaron dilatados en los míos.
yo prometí voltear mi rostro para no mirarlos,
y sin embargo me persiguen como culpas...
y un suspiro se escapa de tu tumba, cuando lloro.
Cerré la puerta del pasado para que ya nunca volvieras
y le dije a mi conciencia...Calla!...No la nombres!
No la encontrarás...se encuentra bajo tierra.
sin embargo, la tumba esta vacía...renaces cada día,
como una amapola que nunca se marchita.