Ten piedad de mí, si lo tengo todo
pero no te tengo a ti. Dinero, autos,
carrera que me importa! Cualquier
hombre que dice que no necesita
a una mujer no es un hombre.
Necesito una mujer para ser hombre.
Lo daría todo por ti. Una buena casa,
una buena cama, están bacías
si no estás allí para hacerte el amor.
Mi más grande fortuna es tenerte gimiendo
e implorando por más.
Tenerte en mis brazos es lo que más necesito.
Sentir tus besos por todo mi cuerpo es mis éxtasis.
Lo tengo todo. Tengo a muchas pero no hay nadie
como tú. Las tengo a todas. Pero a la que quiero
es a ti. ¿Qué puede estar en contra mía?
Para que seas mía hasta la locura.
Tengo el derecho de amar a una mujer como tú,
que me acaricie, y que me bese. Que me dé su amor;
todo lo que quiero de ti es que también me ames.
Tenerte en mis brazos es lo que más deseo.
Sentir tus besos por todo mi cuerpo es un éxtasis.
Lo tengo todo. Tengo a muchas pero no hay nadie
como tú.
Durante mucho tiempo había conocido gustos diversos
en mujeres, cada una diferente a otra, su olor, su aliento
y el sabor de sus labios de arriba y abajo
hasta que probé tu amor. Tocaba sus cuerpos
pero no sus almas, nunca he estado consciente
de su presencia en mí hasta que te conocí.