Antonio Leyva

SONETO A LA MUERTE

Te espero paciente, serenamente,

Fiel al cruel destino que me condena,

No siento miedo, tristeza, ni pena,

Escucho a Sabina y bebo aguardiente.

 

Me iré como hombre, sincero y valiente

Y sé que he vivido una vida plena,

Me marcho sin prisa, es mi última cena,

Mañana es el día, río en el presente,

 

Alguna otra gloria y muchas desgracias

Que aunque pocas ¡cómo las disfruté!

Poca malicia y suficiente audacia

 

Pido paciencia ya pronto me iré,

Logré sentir ¡a la vida doy gracias!

La misma emoción de aquel que se fue