Nuestra historia tenia miles de remiendos y muchos monólogos, intentando buscar el correcto y crear un prologo que no se quedará en sueños rotos. Perdiendo así la inspiración de momentos gloriosos donde pudimos haber sido infinito en estas noches donde solo existo.
Punto seguido le escribimos a nuestra historia y al no querer dejarnos ir le pusimos miles de comas para poder tomar así un breve respiro y releer con más calma la desolación de nuestras almas.
Puntos suspensivos guardamos en nuestra memoria queriendo no terminar así nuestra historia.
Punto y coma necesito un respiro para volver amar como en el principio, paréntesis y no escuches mis latidos, amor del bueno o eso creo que necesito y si no te llevo conmigo no sigas mí camino.
Signos de pregunta casi acaban con lo poco que nos quedaba, pero pronto llegaría ese momento donde vería el tren que te llevase a otro lugar, lejos; muy lejos de aquí.
Intentamos remediar el daño, pero punto final y aquí acaba, solo quiero llevarte en mi memoria y amarte mientras releo nuestra historia, esperando tú regreso en la estación de tren escribiendo bajo la luz de la luna viendo como te reflejas en las estrellas y en el ocaso donde juramos ser solo uno.