Mariposa tintada de rosado,
esplendor de cristales tornasoles,
un regalo secreto acicalado,
escondido en la tierra de arreboles.
Las pupilas del hombre hipnotizadas,
observando en el vuelo caviloso
el candor de rosáceas tonadas
que provoca revuelo silencioso.
La belleza abrazó la mariposa
con sus alas abiertas, un portento
en quietud es muy poco luminosa
perfección convertida en monumento.
¡Guanacaste es santuario del insecto,
mariposa que muestra lo perfecto.!
Fabio Robles