Voy a escribir como me venga en gana;
por ahora me olvidaré de las tildes
de las comas y los puntos
de puntos y comas, y de las pausas rítmicas dejaré de lado la métrica y los acentos
no mediré versos ni les pondré pausas,
diré palabras más comunes como: religiosos, hipócritas,
perros, políticos, gobierno, ladrón, flor, espina, hombre, animal,
mujer, serpiente, policía, corrupción, iglesia, ramera,
pero ahora, sí, ya vinieron las puntuaciones...
pero me olvidaré de sinalefas,
de hiatos, de diéresis y sinéresis;
no respiraré los diptongos ni los triptongos,
diré lo que me venga en gana y como me dé la gana, aunque se molesten el cura, el juez,
el político, el pastor o el crítico literario.