Connie D

El mar que escucha

Mi Tierra, que no siempre la sentía mía, ya que, más que tierra mar era

disfrutaba sentarse en  mi orilla

Y jugar entre mis pantorrillas

 

Ella solo me escuchaba si dentro de un caracol mi voz se arrodillaba

Y si quería enviarme un mensaje

Que a dios le rezara

 

Su silencio me besaba

Andaba siempre descalza

si tenía pena me exclamaba

Tranquila caracola

Cántame una barcarola

Me Sanaba como sonaba

Y hoy rece a dios para que me inspirara