José Luis Barrientos León

El final de este viaje

 

Me he convertido en fantasma entre los telones de la vida

Una existencia acumulando incredulidades, olvidando gestos y afectos

Y despierto entre soledades, entre el frío y los recuerdos

Con un deseo perverso de lanzarme libre a los brazos del viento

 

Hoy en la hora inmediata después de la espera

Me encuentro sin tiempo, sin mujer ni azucenas

Mi luna está solitaria en la inmensidad de la noche

Ha perdido su voz, ha fallecido su verbo

 

Vuelvo al gesto primero, al que descubrió la unción de tu cuerpo

Vuelvo al pecho de abrigo, que aprisiono mi sonrisa

¿Acaso el beso y la arena tienen de nuevo su tiempo?

¿Acaso el camino desierto revivirá mi alegría?

 

Desnudo mi alma ante el viento para viajar a tu encuentro

Alumbró la noche desierta llenando de mieles mi boca inerme

Envuelvo en mi cobijo de espera, el mar infinito y su aullido de niño

Proscribo de mis años caducos el olvido perverso y el tedio asesino

 

Espero el final del poema junto al canto del ave

Ansio el calor de tus labios para encender nuestra hoguera

Entrego en tus manos de ángel mi inocencia primera

Y juntos al final de este viaje uniremos el cuerpo, el tiempo, el viento, el mar y la arena