Lindo es ver desplegar
las alas entusiasmada
comenzando a volar
a la alondra dorada.
El cielo la espera
con su celeste placer
es una infinita era
con gozo a recorrer.
Y darse cuenta ahora
mirando desde arriba
ver esa inmensa aurora
igual a la de su patria perdida.
Te ví crecer angustiada
tu fino talle quebrantable
se hizo macizo angustiada
de sacrificio angustiable.
Fue tu mejor sueño
el volar insaciable
ya sin fruncir el ceño
a las cosas desagradable.
Tiende tu mano al viento.
sin recogerla al hermano
que recorre barlovento
al llegar cansado al hermano.
¡Qué alegría se siente
verse el cenit alcanzar,
sé siempre prudente
poderte alegre coronar.