DESDE ENTONCES.
Y desde entonces:
Sé que vivo,
que respiro.
Como vive la noche,
como el día vive.
Desde entonces:
No hay reproche,
sólo extasío,
caricia y trasnoche,
sueño y desvarío.
Y sé que amo,
que el amor existe
y me haces falta,
pero no me basta,
con tomar tu mano.
Ansío tu frente,
tus labios,
y el beso ardiente,
de mágicos resabios.
Añoro tú alma,
amo tu todo,
y eres de algún modo
en mi tormenta, calma.
Y desde entonces,
eres tan querida,
dueña de mi vida
y de mis romances.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA)
Enero, 24 del 2020.