Si... te sigo en el aire,
tu perfume flota y trasciende,
mimetiza y se pierde,
camaleónico es tu aroma.
Aún así... te sigo,
indagó, busco y te encuentro,
persigo tu esencia,
valoro tu ser... férreo y robusto.
Te pierdo... me aferro a ti,
eres inconfundible más...
tal vez inalcanzable, aún así
me esmero y retomo tu efluvio.
Aura tierna y benévola,
no hay como tú ninguna,
perfecta concepción de tu alma,
singular eres, única e irrepetible.
Por ello... cómo gas etéreo viajas,
cómo espíritu amorfo vagas,
y decantar lograste en maravilloso envase,
Mujer... es tu nombre.