No sé en qué creer,
si en mis pensamientos o en mi corazón,
siento un vacío en mí
que ni llorando se me quita.
En mis sueños tú estás,
tan callada, tan austera,
yo siento que sientes lo mismo,
pero no me lo quieres decir.
Este sentir se siente confundido,
llora por tu ausencia y
busco agazaparme, pero no rendirme.
Tan inocente es mi corazón
que todavía está suspirando por ti,
cuando te mira, quiere correr a tu encuentro.
Mi corazón aturdido está
por tanto querer, llorar,
mi corazón se siente preocupado
porque tú no estás.
Esta zozobra alude mi existir, este
llorar amarga mis días y mis noches.
Estoy vivo por fuera,
pero me voy muriendo por dentro
por la partida de los momentos felices
llora por la falta de tus ojos.
Mi corazón ya no resiste,
quiere estallar arduo,
quiere gritar,
pero se queda callado.
La agonía de tu voz,
el sufrimiento de tu recuerdo,
el atardecer de mis días
y los relámpagos de mis temores.
Con un suspiro tuyo y una mirada tuya
basta para satisfacer mis días,
con un suspiro,
tranquilizas mi zozobra.