Mientras te extraño,
el tiempo agita en mí las ganas,
de darte los besos del hoy, del ayer,
y de todos los mañanas que nos queden,
y morder cada minuto de tus horas,
Y aferrarme a cada hora de tus días.
Mientras te extraño,
quisiera arrancarle a mis años toda tu ausencia,
Y despojar de la memoria la nostalgia,
de los amaneceres diluidos en el tiempo,
de las noches ya marchitas,
del vacío que ha dejado a mis ojos
la mirada de tu ausencia.
Mientras te extraño,
corre el amor al ritmo del tic tac de los suspiros
que van estrujandome la vida, desgastandome la piel,
llenando cada pulso con la rabia de tu olvido.
Mientras te extraño,
sólo el amor o el tiempo
florecen o marchitan estos labios,
estos besos, estas ganas,
solo el amor, solo el tiempo.
SALO.