En plena oscuridad de la noche hipnóticamente
sentado frente a la hoguera, viendo al fuego y
sus llamas bailar, soy capaz de pensar en todo
y a la vez pensar en nada.
Sigo con la mirada ese mundo que es el fuego
y su danza, pues me brindan calor y un mensaje
misterioso que no consigo descifrar, pero sé que
me hace mucha falta.
Quizás sean las mareas de la Poesía que la Luna
les Incita hablar bajito, o talvez sean solo suspiros
de las estrellas en forma de luz iluminado todo este
Poema
Sea lo que sea, parece que hasta mis heridas abiertas
se cierran, creo que en este momento, sería capaz de
perdonar hasta al mismo demonio.
Y aquí estoy solo, delante de el fuego como única compañía
la hoguera y mi espíritu, reparando sentimientos, ablandando
el pensamiento, repasando mi vida por capítulos, como si estuviera escrita en un mágico libro, oyendo los chasquidos
de la madera ardiendo, sigo mirándome adentro, muy adentro
Ya no oigo aquel grito interior que me agobiaba, noto eso sí dormir plácidamente mi espíritu y mi alma, sigo mirando la hoguera, esta noche parece que todo mi Mundo está en una
densa calma.
Mael Lorens
Reservado el derecho
de Autor 28/01/2020