Es un día de tantos... es cierta hora aquí, es una década más en el calendario...
y los días se consumen como el cerillo cede de a poco frente a la llama...
Son épocas poco reflexivas, entre gente que se va consumiendo en sus propios ideales...
Las antiguas leyendas ya no se cuentan en ningún sitio.. ahora solo viven en una memoria abandonada... como edificio en ruinas que desentona el avance típico al que obligan los años...
Se niegan a morir aún cuando a nadie le importan...
Son el sinsabor en los recuerdos de algunos... son las fantasías en las mentes de otros... que sucumbieron ante el hilo social que conduce una vida... resultan ser el letargo de pocos... que se niegan a avanzar y se conducen hacia ningún sitio...
Porque, sea este camino o aquel, ninguno es auténtico en sí mismo... son paralelismos contradictorios de repeticiones universales... que se suscitan una y otra y otra vez hasta el final de los tiempos...
y es que, a cómo se van los años, pocas cosas resultan ser realmente importantes... pocas cosas resultan ser esenciales en la inmensidad del mar de la superficialidad que nos domina.. nos cega ante una inquietante verdad que se esconde a diario...
Qué somos?.. para qué estamos?.. qué nos define?.. qué buscamos?..
Se van los años y se llega a viejo con las mismas preguntas que no suelen encontrar respuesta... se van los días y seguimos divagando entre las inciertas.. las inciertas verdades que se nos niegan...