Piedras, ruinas, anocheceres eternos,
Cuántos más y el sol no saldrá,
Aquí me encuentro, y cuantos van?,
Tormenta, cielo gris, cruda realidad.
El tiempo destruye todo,
Vacío tormentoso, eclipse monótono,
El sinsentido es el sabor de todo,
Hoy camino por la sombra y no me asombro.
Maremoto, oleadas infestadas, escucho el termómetro,
Bajo cero me siento en mi entorno,
Un vino, un cigarro, sin alboroto,
Saco cuentas, la calculadora se ha roto.
Es que no entiendo que pasa,
Estúpidos defectos, hechan a perder todo,
Mi corazón desvariado, perdió el tono,
Cielo cubierto, que cubrió mi entorno.
Lo injusto y lo justo que relativo,
No cosecho nada de lo que cultivo,
Culpable o no, me cago en todo,
¡Demonios! Un viaje sin retorno.
Un río sin rumbo viaja a oscuras,
Nuboso, lluvioso, ¡ay que amargura!,
Al rito lo esquivo, ya no hay locuras,
Y me siento despacio, dejando que fluya.
TM.31