Me recuerdas al viento tempestuoso,
que golpea mis momentos, mi razón
y me arrastra al laberinto de tus sentidos.
Me recuerdas al océano inconmensurable,
dónde inadvertida entre olas te pierdes
y yaces entre estelas de olvido.
Me recuerdas la compacta neblina,
que devora mis anhelos a su paso
y trastoca uno a uno mis sentimientos.
Me recuerdas al hombre en el espejo,
si... a mí, quien te sigue en tus veredas
y busca el sendero para llegar a tu corazón.
Y heme aqui recordándote en mis lamentos,
buscándote en cada una de mis poesías
para llamarte como solo yo lo haría... mía.