Suspirando te recuerdo sin odio ni pesar,
estas perdonado y también ya olvidado,
no sueño con una de las bocanadas de bar,
porque otra vez, y para siempre la calma he conquistado.
Nadie que me hable o que me cuente de ti
podría hacerme siquiera, respirar y sonreír
solo pienso en todo aquello por lo cual dimití
cuando tenía en mi mano la emanación de aquel sufrir
Y hoy que me encuentro un tanto sentimental
Respiro y sonrío al saberte en otro lugar,
En otro pulmón con tu extrovertida manera de atar
Mientras el modo de vida de mis alvéolos ya parece mejorar.