¿En tu cuerpo de ternura cuando hacemos el amor,
O En la esencia que llevas dentro?
Y es que aunque el tiempo nos cambie tanto,
Inmutable vive en ti esa niña de la que me enamoré.
Y no es tu cuerpo, ni tu esencia de niña,
es lo eterno que hay en ti.
Porque Dios me dio a beber
un pequeño sorbo de eternidad,
suprema eternidad
contenida en tu fragilidad.
Y no solo es tiempo, es eternidad,
La perpetuidad de mi amor
Que encuentra la indulgencia de los años
cuando habita tu alma.
Y creo que allí habita el amor,
en ese fragmento de tu ser,
más allá de lo tangible o lo mortal,
Ese fragmento de lo eterno,
regalo divino que llamamos alma
SALO.