Me siento extraña.
Tan extraña que he llegado a creer que me conozco menos.
Me siento cansada.
Tan cansada que creo que me pierdo.
Mi mente está dispersa.
A veces no sé ni lo que pienso, otras no lo comprendo.
Siento que muero, me desvanezco.
Pero entonces te veo.
Como ángel caído del cielo, vienes a mi rescate y me dices,
No temas estoy aquí, no te vayas, que si te vas también me voy a ir.
Sonríes y me abrazas, dices que me amas y nos alejamos volando de aquí.
Me siento vacía,
Como si alguien drenó mi energía.
No puedo más, solo quiero descansar irme de este lugar.
Sabes a lo que me refiero y lloras.
Me miras a los ojos y lloras, me abrazas, no me sueltas y dices,
Yo estoy aquí, aun hay por qué seguir, te quiero entiéndelo no te alejes de mi que si te vas también me iré. Olvida todo lo demás, que mientras yo esté aquí nada te va a herir.
-Limoneyes