Me gusta escuchar el silencio de la noche, sentirme sola, donde no haya nadie más que yo, pues a si puedo meditar en las cosas que andan bien o mal, pensar en el futuro aunque sé que es incierto, pues sólo Dios sabe que vendrá, pero la noche me trae recuerdos, en su silencio la noche aquella en su coche, no saber si decirle si o no, pero cada noche en silencio quisiera devolver el tiempo para abrazarte y decirte si en vez de aquel no que te di. Que noches más hermosas aquellas que solo éramos tú, yo y el silencio de querer besarte, quiero escucharte otra vez decirme, esta noche aquí estoy para ti, decirte si, has lo que quieras de mi. Solo me queda meditar en el silencio de la noche, acordarme que nadie supo escucharme como solo tu lo hacías.