El amor es una fuente inagotable de reflexiones: profundas
como la eternidad, altas como el cielo y grandiosas como el universo.
Alfred Víctor de Vigny
A partir de tus hombros, se bosqueja una espiral barrada
de diminutas manchas con acento atezado, adonde
agrupadas todas ellas, dan colorido a la expresión de
esa blanca piel, proponiendo un aspecto contrastante
en tu sistema corporal, en donde mis ojos se pierden,
en aquel rodal de lunares infinitos, a esa parte
de tu físico que acentúa tu belleza, donde tus pecas
se convierten en máculas que se reflejan como estrellas,
en ese espacio sideral, que da forma a la escena de tu
buena apariencia, es ahí que fallezco al contemplarte,
vivo en esa galaxia externa de beldades, viajo por el
universo entero de tu cosmos, por la comarca de tu ser,
en donde mi corazón vibra con violencia a la hora de
dirigir la mirada, de explorar en ese nuevo mundo
de sueños, a donde pretendo amar, en tu vía láctea.