Quisiera poder describir
la primavera y sus vuelos efímeros.
Quisiera explicarte qué es el mar,
la luz del Sol y las sonrisas,
las huellas sempiternas
de haber sido invencible
en un instante.
Que siempre queden en mis ojos
colores que nadie más vea
para poder preguntarme si seguiré
siendo real
cuando no quede ya nadie que me entienda.
Quisiera ser tan real
que tuviera sentido el miedo
a ser tan pequeña.
Quisiera poder dibujarte las estrellas,
y explicarte que no existen,
que no me busques más en ellas,
que yo estaré en otra dimensión.
Quisiera aferrarme a los momentos
justo antes de que desaparezcan
y agarrarme a ellos como si pudieran,
como si pudieras evitar
con tu mirada
que me desvanezca.