En el ritmo de la palabra
todo el dorado me envuelve
versos de pasas y miel
que con canela se encienden.
Se abre un abismo leve
entre la palma sonora
los párpados incansables
pero…con un silencio breve.
Un sueño de algarabía
canta en mis sienes
convocando cientos de imágenes
acariciándote mientras duermes.