Edmundo Onofre

MI ESPEJO

Cuando esté equivocado

si estás cerca mío, susúrrame al oído;

si a la distancia te encuentras, hazme un gesto discreto.

No quiero andar a equivocaciones por la vida.

Prefiero enojarme sólo contigo

a que cometa mil errores bien seguidos.

 

Valoro tu crítica

aunque ingrata me sea,

sólo en ti confío.

 

Quiero que seas mi espejo

para corregir mis gestos,

mis palabras y mis actos;

que más de las veces estos errores

sin mala intención los hago.

 

Necesito tus consejos,

¡Por favor... te lo pido!

 

Tal vez aún no he madurado plenamente

porque a menudo me arrepiento de lo que hago,

digo o pienso.

 

No me colmes sólo con palabras buenas...

dime, de vez en cuando,

aquéllas que también me condenan...

No creo ser un hombre perfecto y bueno,

también me equivoco, lo prometo.

 

Avísame urgentemente

cuando a alguien haya ofendido,

cuando juzgue a priori

o exista algún mal entendido.

 

Te prefiero cerca mío,

no te alejes demasiado, te lo pido.

 

Necesito seas mi espejo

para que me digas con sinceridad

cuál es mi comportamiento

y lo que yo al mundo reflejo.