Simon Abadia

Tramos convulsos

Tramos convulsos

Brindemos por ayer
si es que recuerdas algo.
No me queda ni fuerza ni memoria,
tan solo dignidad,
y poquito amor para perdonar.

Después de los silencios
con las ventanas llenas de fantasmas
toda palabra sobra,
solo tus gestos de mirada limpia
llena mi corazón
viendo el silencio que me habla en siseo
mandándome callar.

Alrededor metrallas enterradas
ocultos los rencores
observando adivinanzas en caras
que en la tirantez de los labios
musitan tristezas ocultas
en un estilo de vida
donde se mezclan amores y odios.

Ya no me queda ni una sola gota
para poder brindar,
ni me queda rencor escondido
que me fue minando poquito a poco,
mientras yo me hice de otro mundo
simplemente, porque salía el sol.



                           de cielo y tierra