Hechiza mi lujuria,
En el reflejo de tus ojos,
Con el suave sonido de tu voz,
Sintiendo nuestro espíritu vivo,
Rompiendo la armadura de lirios.
Imprégname de tu fragancia,
Desnudando el alma entre la tormenta de auroras boreales,
Que fluyen con el manto de besos en murmullo.
Respírame fuerte,
Y calma mi pasión,
Pasión en alma de vida,
Respírame en calma,
Y revive mi pasión,
Pasión entre tú y yo.
Estremeces mi alma y los sentidos,
Buscando el amor más allá del deseo,
En mutua complacencia y complicidad,
Entregando mi amor en tu piel,
Renaciendo el amor siempre en ti bella flor.
Revíveme, disfrútame, inclíname hacia ti,
Entre tus pliegues ligeros,
Con mis manos asfixiadas de ti,
En tu carne,
Dentro de tu carne,
En tu respiro candente,
Cubriéndome de absoluta felicidad,
Con el deseo del amor,
Mezcla de juego y plasticidad.
Arrastra tus caderas por el deseo vivo,
Revive tu calor como el fuego,
Únete en la orilla del mar,
Con tu cuerpo, con tu alma,
En pasión de lujuria viva,
Que me haga incrustar en tu placer,
Dentro de tu suave sentido de mujer.