Las 6 de la tarde
en este lugar,
el cielo está oscuro
en grises azules
y blancos de nubes
que descargarán
la lluvia llegando
al lago Cedar.
Las 6 de la tarde,
los árboles cantan
moviendo sus ramas
al son de un violín
que dirige el tiempo
que anuncia la lluvia
trayendo mosquitos,
tábanos y avispas
al atardecer.
Las 6 de la tarde
desde el gran silencio
roto con cien voces,
vecinos contentos
jugando partidas
que yo nunca entiendo
mientras que las nubes
se agrandan al viento.