Si triste es la tempestad,
más lo es un velero
sin viento que lo empuje
hacia melancólicos confines.
Si pena da un violín
con las cuerdas rotas,
ni punto de comparación
con una despedida otoñal
con sabor a sad violín.
Si triste es un tiovivo oxidado
en una feria en ruinas,
más lo son sus caballos
girando sobre su eje
sin niños haciéndolos trotar.
Si triste es estar solo,
Más lo es sentirse náufrago
en un paraíso de islas desiertas.
Si triste es estar triste,
peor es no haber conocido
nunca la tristeza.