Esteban Mario Couceyro

Tristeza de un ocaso

Soy según creo

un sensible tardío

que desnuda su alma

en la puerta incierta

del final de su vida.

 

Ignorando si esa puerta

es del infierno

..

o lo que es peor aún

la del paraíso.

 

Trato de comprender

ya no todos

..

solo algunos asuntos

relacionados al vivir

y a eso del morir.

 

Viendo los atardeceres

tornar en colores

naranjas

para quedar en ese

azul profundo

negro

como el cerrar los ojos.

 

Pienso en la música

que la siento lejana

al compás del piano

y ese largo lamento

de los violines.

 

Sentado

en el sillón

voy escribiendo

estas letras

en el infinito blanco

mientras te recuerdo

en la orilla del mar

riendo

tan joven

hace tanto tiempo ya

...

y no puedo regresar.