He añorado mil noches, sentir las marcas de tus labios sobre mi cuerpo.
Sentir el calor de tu piel, sentir cómo tu respiración se agita.
Cuando pierdes la cordura con mis besos.
Quiero escucharte decir, que eres mía.
Tanto te he deseado que anoche, mi mente te hizo llegar.
Cada uno de tus pasos pesan fuerte sobre mi alma.
Mis sabanas recuerdan, cada curva de tu cuerpo.
mi almohada grito de alegría.
Tu perfume lleno cada pasillo de la casa.
Aun la luna hizo fiesta al verte llegar.
Lo que hicimos anoche será nuestro secreto
Guardare silencio hasta que te vuelva a ver.
Hasta que vuelva a sentir tu piel canela.
Amarte en silencio es mi condena, estrecharte entre mis brazos, es mi bendición.