Volverán las praderas
a vestirse de gala,
y vendrán los gorriones
a cantar las mañanas,
y de nuevo, las fuentes,
vibrarán en las plazas
para dar al sediento
unas gotas de agua,
y vendrás, primavera,
de manera temprana
con candor y caricias
a secarnos las lágrimas,
porque atrás, el invierno
ha cubierto su etapa,
ese ciclo tan largo
que a los hombres amarga...
Volverán, nuevamente,
a entonar las cigarras,
la canción melodiosa
que la brisa desplaza,
y tendrán los oídos
esa música sacra,
con el sueño y leyenda
que la misma acompaña,
y tendrán mil regalos
los abuelos del alma
al saberse queridos
por sus nietos de plata,
esos niños pequeños
con su lengua preciada
que preguntan y piden
tantas cosas extrañas...
\"...Volverán los gorriones
a la rima y el aula,
y otra vez, los poemas
dormirán con el arpa...\"
Rafael Sánchez Ortega ©
28/01/20