boris gold

IR O VENIR...QUE IMPORTA

 

Madrugada de Buenos Aires, noche calma y con una suave brisa que viene del río, no se ve ni un alma deambulando por ningún lado, solamente los arabescos que formaban los árboles reflejando sus sombras, bajo los pocos faroles que por allí había.

A la distancia se dibuja el contorno de algo que se va haciendo más nítida a medida que se agranda, por fin se convierte en una silueta que cansinamente avanza con pasos inseguros.

¿Quién podía ser sino él? “EL VIEJO POETA”, parte integrante del inventario de la city, el juglar que nunca dejó de ofrecerle sus versos a su bien más querido, a la que había jurado fidelidad por siempre…su BUENOS AIRES.

Venía zigzagueando por alguna copa de más y cuando quedó justo bajo la luz del lugar se podía ver su rostro, era un mapa que mostraba a las claras huellas de mucho sufrimiento, su mirada hablaba de  olvidos y desengaños.

Da la impresión que la gran ciudad de vez en cuando tiene la necesidad de hacerse ver, es el momento en que vomita algún personaje con su marca registrada, lo que no nos dice tal vez por mantener el secreto, o simplemente por mantener la privacidad, nos niega algo concerniente a su historia… que de seguro tendrá.

Y allí va, donde sus pasos y el destino quieran llevarlo, aguantando las burlas de la gente, que siempre es tan desaprensiva para con los que son diferente a ellos.

Y es cierto, él no es como los demás, “ES UN POETA”, un hombre que charla con la luna y que las estrellas le hacen guiños…por supuesto que es diferente.

Quién como el viejo poeta puede ir por la vida desgranando letras y con ellas ir formando fantasías y realidades al unísono, o contándonos historias de países imaginarios.

Con princesas y príncipes que nos muestran un mundo de amores soñados y nos pintan un planeta color ilusión, solamente alguien como él…UN POETA.

¿Qué será de nosotros cuando de las tres hurras y se vaya a tomar unos vinitos,  con otros contertulios al lugar de los sensibles seres que se tutean con la vida?.

Menos mal que el mundo tiene recambio y para escarnio de aquellos, que la sensibilidad y el lirismo son una mala palabra…

LES GRITAMOS A VIVA VOZ

                                          ¡HAY MUCHOS COMO EL VIEJO POETA…TODAVÍA!.

                                                                                                                   

                                                              Boris Gold

                                                    (simplemente…un poeta)