En un momento…
Tu cara es como la luna ,
como la lluvia fresca
que refresca las cosechas desechas.
Tu sonrisa es como aquel amanecer,
como aquel girasol que no deja de crecer
y brilla con luz propia al atardecer.
Cuando observo la luna llena,
cuando observo el océano
me embarga un gran tristeza,
me consume un gran desvelo.
Cuando la lluvia cae,
cuando la luna mengua
la flor de la vida renace,
la noche y el dia llegan a una tregua.
En aquel momento,
en que el viento acaricio tu rostro,
en donde el tiempo se volvió incierto
se encuentra un bello lamento,
que aparece en ese terrible tormento.
Me condeno a mi misma pensando
en el cielo de tus bellos gemidos
y simplemente me quedo pensando
en el viento y la lluvia entristecidos
buscando cualquier excusa para acariciarte
sintiéndose dichosos por tocarte.