Eliseo J Benitez

Mi desesperante decisiĆ³n

Hace años miraba tu hermosura, tan enfantizado en tu elegancia; aún en tu desastre me encantaba contemplarte hasta la nostalgia.

Y con solo besarte, encontre el arte de tan solo amarte en esta estancia.

Con mucha arrogancia, me quede tendido, como un barco herido en un mar de lágrimas.

Sintiendo tan perfecta y armonia tu dulce voz como suaves gotas de la aurora fría.

Y en tu inconstante amor, se partió en dos lo que unos meses creí en vos.

Y ahora mi constante mente sabe que no miento y que lo lamento y no necesito mas; que enterrarme en tus ilusiones con tus decepciones y volverte a besar.